En octubre, unas 100 sanjuaninas comenzaron a formar parte del programa Mujeres Construyendo, una capacitación en un novedoso sistema de construcción en San Juan con placas de telgopor contenidas en mallas de hierro. Tras una evaluación, fueron 60 las que aprobaron y ahora deberán demostrar lo aprendido con la práctica. Para ello realizarán un comedor infantil y un taller textil.
El curso lo lanzaron en conjunto la Dirección de la Mujer y la de Cooperativas. Si bien en un principio fue para víctimas de violencia de género, después se extendió a mujeres emprendedoras e integrantes de cooperativas que deseaban formar parte del mundo de la construcción.
Como ya culminó la etapa de la teoría, ahora tendrán que demostrar sus conocimientos con la práctica para las que se están preparando visitando obras que se construyeron con ese sistema. Entre ellas están una ubicada en la Ruta 20 poco antes del cementerio de Santa Lucía que pertenecen a un barrio residencial.
Al respecto, el director de Cooperativas, David Domínguez, informó que estas mujeres van a realizar dos salones con baños. Uno es para que funcione algún comedor infantil que actualmente reciba a los chicos al aire libre y otro es para un taller textil.
Tras la difusión de este curso hubo varios pedidos de sanjuaninos interesados en que realicen nuevas convocatorias para la capacitación así que están trabajando para comenzar otra. Ahora buscan que sea mixta, aunque aún no hay nada definido.
La capacitación
El curso se dictó por Zoom y estuvo dividido en dos etapas: teoría y práctica. Además, hubo una evaluación intermedia, un examen teórico que aprobaron 60 participantes y que ahora realizarán la práctica para poder obtener el certificado final.
Para recibirse del curso tendrán que construir una obra cuyas herramientas y materiales los podrá a disposición el Ministerio de Desarrollo Humano.
El sistema de construcción con placas de telgopor contenidas en mallas de hierro
Uno de los ingenieros civiles que dio la capacitación y que a la vez es representante de Río Deco, la empresa que elabora las placas y que es una sociedad del Estado, Juan Lirio, explicó en diálogo con este medio las características de este tipo de construcción.
Se trata de un sistema monolítico, es decir, que está compuesto una parte de aislación térmica de telgopor cuyas caras llevan mallas exteriores de acero de alta resistencia y están unidas por otros hierros que van soldados. “Van con un concreto de micro hormigón en ambas caras”, informó el ingeniero. Con respecto a las ventajas, se encuentran que la construcción es rápida y que es entre un 30% y un 40% más económica que la tradicional con ladrillos. Además, no se usan ni madera ni clavos y se reemplaza el muro, la columna y las vigas por una placa. “Viene todo junto. Se va armando la casa en función del plano y se van atando las placas con alambre unas a otras”, dijo Lirio. En cuanto a la durabilidad, el especialista sostuvo que es la misma que la de cualquier casa tradicional. “La calidad es muy buena, tiene una inercia térmica superior al ladrillón, como tiene aislación térmica, hay un ahorro energético bastante interesante”. Como las fábricas de estas placas no están en la provincia, la cooperativa Medisur es la que la representa acá. Las mujeres que se reciban del curso podrán hacerlo de oficial, medio oficial o de ayudante, según su desempeño, y su certificado final va a tener la firma del presidente de la fábrica y de Juan Lirio que es el representante en la provincia
